viernes, 14 de enero de 2011

Programa: El disfrute de proyectar.

Definición general, objetivos y dinámicas docentes

El programa de esta unidad A de Proyectos Arquitectónicos pretende destacar la siguiente realidad: la acción de proyectar puede ser un acontecimiento plagado de disfrute.
El disfrute, que recientemente está despertando un gran interés entre los científicos de occidente, promueve una alta eficacia y productividad en la gente que lo experimenta mientras trabaja. Los últimos trabajos científicos convierten al disfrute en un objeto de estudio que los arquitectos no podemos pasar por alto en relación a la acción de proyectar.
Este programa arranca con dos premisas que construirán la identidad del curso:
          1- Se trabajará de forma brutal, en ritmo, cantidad y calidad del trabajo.
          2- Se buscará el disfrute de cada uno de los minutos de trabajo.
El objetivo de esta estrategia es conseguir cientos de horas de disfrute asociado a la acción de proyectar, estableciéndose dinámicas que se consoliden y que acompañen firmemente al estudiante, primero en su carrera académica y posteriormente en su vida profesional.
El disfrute, como el proyectar, no se enseña, sino que se aprende, por ello es el trabajo del estudiante en gran medida el que construye el curso. No habrá más que una clase magistral inaugural; el resto de la teoría se inyectará mediante microalegatos disfrutistas dispersados a lo largo del curso. En estos microalegatos se profundizará sobre las habilidades que los científicos definen como generadoras de altos índices de disfrute, construyendo los vínculos oportunos con la cultura arquitectónica contemporánea, intentando establecer en todo caso dinámicas multidireccionales frente a las unidireccionales.
En el curso se ejercitarán sobre todo cuatro habilidades de gran importancia para  proyectar: Interés, concentración, capacidad de generarse retos e imaginación. El interés es implicación, la concentración es atención simultánea a lo periférico, la capacidad de generarse retos ayuda a alcanzar el estado de flujo, la imaginación es entre otras cosas la construcción de imágenes.
El programa consistirá en unos ejercicios asociados en principio a cada una de las cuatro habilidades propuestas. Se realizará el mismo ejercicio en cada nivel y con el mismo tiempo para su desarrollo. En cada cuatrimestre se desarrollará un primer ejercicio muy corto y estimulante para propiciar un arranque dinámico, y más tarde un ejercicio prolongado en el que habrá tiempo para profundizar en todos los aspectos que demanda el proyecto de arquitectura, desde la reflexión sobre el lugar, hasta la técnica constructiva, pasando por las estructuras, las instalaciones, la organización de plantas y secciones, la imagen, el programa, el comportamiento medioambiental, y tantos otros asuntos que han de tratarse solidariamente desde el inicio del proceso.